Chingue a su madre el que se ofenda.

07 julio 2005

LA HORA FELIZ XIII

Una para expertos... No apta para cuerpos entumecidos, esta posición puede parecer incómoda, pero si la flexibilidad lo permite puede resultar muy excitante. Él se acuesta relajado y erecto. Ella se coloca de espaldas a su compañero mientras se hace penetrar, flexiona sus rodillas y se inclina hacia atrás lentamente para que el pene no se salga de la vagina. Para activar el movimiento necesario para el coito, ella debe levantar su vientre y relajarlo sobre el de su compañero. Él tiene fácil acceso al clítoris y los pechos de su compañera. Ella no puede estar más cargada de ocupaciones, con lo cual no tiene más que relajar el resto del cuerpo hasta acabar más cansada que nunca, lo que hace más excitante el orgasmo. Según mi entendimiento, esta posicion no es posible para simples mortales, quienes pueden fallecer si un calambre los sorprende.

No hay comentarios.: