Chingue a su madre el que se ofenda.

25 octubre 2005

DE SAQUEOS Y PSIQUIS DEL MEXICANO PROMEDIO

Después del paso de los huracanes, en ultimas fechas, se han observado saqueos, en este caso, el paso de “Wilma”por la península de Yucatán, en especifico, lo que pasa hoy en Cancún.

Se alaba la actitud de la ciudadanía en estas ciudades, se les apoya y se les compadece, son nuestros hermanos, algunos dicen. Sin duda han sufrido, de miedo, temor, hambre, enfermedades, heridas y muertes. El terror por estar en medio de un cataclismo que todo lo puede es tremendo, la desesperación que acarrea no tener agua o comida. Si yo estuviese allí y no tuviera que comer, ahuevo que me robo comida de donde sea, es asunto de sobrevivencia. La gente que sufre y es entrevistada por los medios, es la misma que saquea.

No mamen medios televisivos, la gente que saquea es población civil normal, jóvenes, señoras y hasta niños que no tienen pagada una suite en un albergue de periodistas ni andan por la ciudad en una Hummer. No son delincuentes, todos fueron afectados. Los saqueos a Elektra y demás negocios de línea blanca, electrónicos y muebles, son hechos por la misma población que ha sufrido por el huracán. Esa es la psicosis del mexicano.

Esos son los mexicanos de hoy y de siempre, no nos hagamos pendejos ni dignos con frases de: “Vergüenza y mayor hundimiento en medio de la tragedia”, quienes ante la oportunidad, ven por sus intereses, sin importar el civismo ni la legalidad, a chingar se ha dicho!, si perdí mi casa, por lo menos me llevo una tele. Si no perdí nada, por lo menos me llevo una estufa…

La gente que saquea es población como tu o como yo. Si en medio del caos, de perdidas, de tristezas, me encuentro con un aparador con una cámara de video digital, la que siempre soñé, no dudaría en tomarla, el caos lo justifica…esa falta de “escrúpulos” también es parte de “México”, nosotros además de aguantadores, luchones y valientes, también somos tranzas, ojetes y oportunistas, viejitas con su 24 de coca colas pueden atestiguar sobre esto. No se selecciona aun en tragedia, que comer y que no…parejo, a destruir tiendas, a tomar un poco de lo que acumulan gracias al robo disfrazado de comercio. (Gracias Chedraui, me diste un pelo de gato)

Dejen de ensalzar el “mexicano en desgracia”, que es el mismo que se aprovecha de estas cosas…y el que no, lo hace porque no necesita o por cobarde…

Solo basta imaginar que pasaría en otras ciudades del país, donde además de delincuentes, chamacos de prepa y señoras bravuconas no dudarían en quitarle unos pesos a Salinas Pliego, aunque Javier Alatorre se empute.

Y ASI LO "CREE" EL ATEO®...

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